El escritor cubano Angel Santiesteban ha sido detenido este miércoles tras un altercado con la policía política, en medio de una nueva ola de arrestos domiciliarios y vigilancia policial.
“Fue injustamente condenada por buscar pacíficamente justicia para los manifestantes detenidos”, señaló en la red social X la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado.
"Continúan robándole los alimentos y productos de higiene de la jaba" y "bajo amenazas de repetirle las mismas crueles y extremas torturas implementadas en los meses de julio y agosto", dijo su hermana.
"El Estado sigue creando un andamiaje legal que le permite reprimir con total impunidad cualquier expresión que se de en el espacio público", dijo a Martí Noticias Laritza Diversent, directora del grupo de asesoría legal Cubalex.
La periodista independiente Camila Acosta, su pareja el escritor y exprisionero político Ángel Santiesteban y el opositor, académico y politólogo Manuel Cuesta Morúa están bajo vigilancia de la Seguridad del Estado.
Recurso de Habeas Corpus denuncia irregularidades en la nueva detención de Mario Alberto Hernández Leyva.
Su esposa Eliannis Villavicencio explicó a Martí Noticias que Verdecia le dijo que se manifestaría en la cárcel “cada tres o cuatro días” hasta que su caso sea procesado en los tribunales.
“Los mismos problemas dentro de la prisión que cada día son peores”, dijo a Martí Noticias su esposa, la Dama de Blanco Sonia Álvarez.
La organización ecopacifista Naturpaz, dedicada a promover la conciencia ambiental y combatir el cambio climático en Europa y América Latina, enfrenta una creciente presión de la Seguridad del Estado en Cuba.
La falta de atención médica adecuada, junto con denuncias de golpizas y otras formas de abuso, refleja un panorama alarmante de violaciones a los derechos humanos en las cárceles cubanas, según advierte la organización con sede en Madrid.
"Lo más preocupante y doloroso es saber que sobrevive de esa jaba, ya que se niega a ingerir los escasos, mal elaborados y muchas veces descompuestos alimentos que suministran en la prisión”, explicó su hermana a Martí Noticias.
Entre las violaciones documentadas figuran sitios de viviendas de activistas, amenazas, citaciones policiales y restricciones de movimiento. El OCDH señaló que 56 denuncias provinieron de presos políticos, presos comunes y familiares.
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